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El avance de las carreteras conectadas con 5G en España y la UE

Carreteras conectadas 5G - Celside Magazine

La llegada de la red 5G no solo marca un hito tecnológico para los móviles y dispositivos conectados. También lo hace para la infraestructura de un país. Es así como la integración de esta tecnología en las carreteras ofrece innovadoras soluciones. Como por ejemplo, aumentar la conectividad y seguridad de los coches que transiten por las carreteras. Algo que en España ya se encuentra en desarrollo, gracias al esfuerzo conjunto de organismos públicos y compañía privadas.

5G en las carreteras, una cuestión de seguridad

El último informe de la Dirección General de Tráfico deja claro que la mayor cantidad de accidentes de tráfico ocurre por errores humanos. Por lo mismo, plantearse la conectividad de las carreteras no solo reduciría los accidentes, sino que mejoraría la comunicación entre distintos coches conectados. Esto repercutirá en una recogida de información que no solo ayudaría a los coches que se mueven por la carretera, sino también a aquellos que estarían a punto de acceder a ella.

Además, implementar un tipo de conectividad 5G en las carreteras permitiría la creación de sistemas de análisis que podrían anticiparse a siniestros. Informando oportunamente sobre cualquier incidencia durante el viaje.

El impacto positivo de las carreteras inteligentes

La red 5G no solo reduciría la mortalidad durante la conducción. También mejoraría la eficiencia de las calles y carreteras, ahorrando tiempo a millones de conductores.

Por ejemplo, se podrían instalar sensores en todos los semáforos que, a su vez, estarían todos conectados por una red de latencia ultra baja. Esto permitiría ofrecer mejores tiempos de respuesta a los peatones. Evitando así las largas esperas para cruzar una calle, reduciendo al mismo tiempo los accidentes producidos por la imprudencia de los peatones.

También sería posible detectar los puntos conflictivos de una ciudad o aquellos con más accidentes. Para luego gestionar un sistema que permita reforzar la seguridad en esa zona específica. Algo que, además, permitiría conocer las causas específicas que generan los accidentes.

El sistema de peajes también se vería beneficiado con una red 5G. Con esto, se podría acceder a sistemas de tarificación con cobro automático. Esto, debido a que los coches conectados enviarán información a los puntos de control, para gestionar las transacciones de manera rápida y sin esperas.

Túnel de Cereixal, ejemplo de innovación

En el año 2019 fue presentado un proyecto llamado Piloto 5G en Galicia, impulsado por el Ministerio de Economía y Empresa a través de Red.es. La idea del proyecto era implementar tecnología de red 5G en el tramo de carretera que incluye el túnel de O Cereixal en Lugo.

Dentro de los hitos del proyecto está la asistencia a la conducción y que incluye el aviso de condiciones meteorológicas a la salida del túnel. Se integra, además, un sistema de aviso de problemas dentro del túnel, entre otros datos de vital importancia para los coches que utilizan este tramo de carretera.

El proyecto recibe actualmente el apoyo de Telefónica, que es la compañía encargada de ofrecer la infraestructura para que la señal 5G esté operativa dentro del túnel. Algo que al día de hoy se encuentra en una fase avanzada, con miras a finalizar el proyecto durante este mismo año.

Cabe señalar que la propia forma del túnel significó un enorme desafío para la implementación de la red. Algo que obligó al operador telefónico a poner gran cantidad de antenas dentro del propio túnel para mantener la cobertura adecuada.

Además de las antenas, el sistema de red de Telefónica incluye nueve cámaras DAI, dos cámaras térmicas y dos cámaras OCR. Eso, además de un opacímetro, para medir la emisión de gases de coches diésel. A la salida del túnel se instaló también una estación meteorológica con sensor de estado de pavimento y nivel de visibilidad. La central de datos se instaló en Montiño, la Coruña.

La llegada del coche autónomo y lo que está por venir

Para que una carretera inteligente sea efectiva debe haber una gran cantidad de coches igualmente inteligentes. Por tanto, el avance hacia la implementación de redes 5G en carretera pasa por la velocidad con la que estos coches entren en el mercado y demuestren que funcionan de manera eficiente.

Sin embargo, para que un coche autónomo cumpla su función debe moverse con una infraestructura adecuada. Algo que implica la utilización de transmisores cada 3 o 4 kilómetros. Una cantidad que, considerando el número de carreteras en España, implica una inversión gigantesca que aún está por definir cómo se financiará.

La Sociedad de Ingenieros Automotrices (SAE) señala que existen 5 niveles que determinan el nivel de autonomía de un coche. Siendo el nivel 0 la ausencia de un sistema automatizado y el 5 el que indica máxima autonomía, con coches capaces de circular por cualquier carretera o ciudad sin intervención humana.

Actualmente, existen coches nivel 3 que pueden circular de forma autónoma, pero en entornos controlados. Eso, sumado a la ausencia de implementación completa de redes 5G en las carreteras, indica que el proceso de adaptación será lento. Requiriendo casi una década para poder ofrecer cobertura total a coches nivel 3 que circulen por las carreteras habilitadas. Y de ahí a llegar a coches nivel 5, ya podemos esperar unos cuantos años más.

Una solución al tema de los transmisores en carretera ha sido ofrecida por DGT 3.0, el proyecto de la Dirección General de Tráfico, y que pretende usar a los propios coches como sensores que permitirían la interconectividad de la carretera. Sin necesidad de poner un transmisor cada cierta cantidad de kilómetros. Esto, porque los propios coches harían de transmisor.

Otros proyectos de carreteras inteligentes en Europa

España está adherida a la plataforma C-Roads, que es un proyecto de carreteras conectadas en donde participan países como Dinamarca, Finlandia, Italia, Hungría y otros países de la Unión Europea. Esta plataforma pretende asentar las bases de los sistemas inteligentes que serán esenciales para la circulación de los coches autónomos. Todo esto, con el objetivo principal de lograr el máximo nivel en seguridad vial.

De esta plataforma han salido varios proyectos pilotos en los que se encuentra DGT 3.0, SISCOGA Extended, Madrid, Corredor Cantábrico y Corredor Mediterráneo. El presupuesto de la plataforma asciende a 17,9 millones de euros y está cofinanciado por la Unión Europea.

Foto por Emily Rusch en Unsplash

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