Consejos y configuraciones para mejorar la seguridad del teléfono móvil

Según los datos aportados por Statista, el portal de estadística en línea alemán, la tasa de penetración de la telefonía móvil en España se situó por encima de las 116 líneas por cada 100 habitantes. Esto, a mediados del año pasado y siguiendo una línea de crecimiento que no ha parado desde el 2016.

Por si fuera poco, la evolución del número de líneas se ha incrementado en el período comprendido entre 2007 y 2020.

Según el informe, hay más de 55 millones de líneas de telefonía móvil activas en España. Lo que implica una recuperación del mercado después de la fuerte crisis económica que afectó al país.

Con esta información queda claro que los móviles son un dispositivo esencial en la vida del español. Por lo mismo, es importante hablar de las normas de seguridad de estos dispositivos. Esto, considerando que nos acompañan a todas partes y, en la mayoría de casos, suelen  contener información vital sobre nosotros.

En el siguiente artículo te damos los mejores consejos y recomendaciones de seguridad para mantener tu teléfono protegido y siempre seguro.

¿Qué es recomendable para mejorar la seguridad de nuestro móvil?

Una buena forma de enfocar la seguridad de un teléfono es organizando las medidas de seguridad en dos apartados. El técnico y que implica hacer una serie de configuraciones en el terminal y el de actitud, que está relacionado con una serie de conductas saludables y que nos pueden evitar más de un dolor de cabeza cuando usamos el teléfono en distintos escenarios.

Recomendaciones técnicas de seguridad

En el apartado técnico de seguridad hay puntos fundamentales que permitirán reforzar la privacidad. Los principales son:

Usar un sistema de bloqueo

Es una de las principales medidas de seguridad y consiste en poner una contraseña, código  o patrón de bloqueo en el teléfono. De esta manera se restringe el acceso a personas que, eventualmente, puedan coger o encontrar nuestro teléfono.

Para activar esta función debemos ir a los ajustes del teléfono y buscar el apartado de Privacidad y seguridad. Dependiendo del modelo del terminal, también nos puede aparecer un apartado específico que dice Bloqueo.

Si pinchamos en este apartado, encontraremos varias opciones de bloqueo. Habrá más o menos dependiendo de las funciones que haya integrado el fabricante en el propio teléfono. Estas son:

Deslizar

Es el sistema más básico de todos. Mediante este sistema la pantalla del terminal se desbloquea deslizando el dedo por el panel, sin más. Sin embargo, este no es un sistema seguro porque cualquier persona que deslice su dedo podrá acceder a lo que tengamos en el teléfono. Por lo mismo, es una de las funciones menos usadas.

Patrón

Con un nivel de seguridad media, la creación de un patrón añade una capa de seguridad básica, pero bastante efectiva. Esto consiste en crear un patrón de movimientos en la pantalla, conectando unos puntos que aparecen en ella.

La variedad de patrones que se pueden generar utilizando los puntos es bastante amplia. Por lo mismo, garantiza que sea muy difícil dar con el patrón que hemos guardado, en caso de que un intruso intente acceder a nuestro teléfono.

PIN

Este sistema tiene un nivel de seguridad media alta y consiste en una secuencia de tres números para desbloquear el teléfono. Es muy importante no olvidar el número, porque de lo contrario no podremos acceder al teléfono o habrá que restablecerlo, perdiendo todo lo que tengamos en él.

Contraseña

Con un nivel de seguridad alto, la incorporación de una contraseña permite usar un número más largo y, por lo mismo, más difícil de descifrar. Al igual que sucede con el PIN es fundamental no olvidar la secuencia, porque de lo contrario tendremos que reiniciar el teléfono. Al hacerlo perderemos todos los archivos relevantes que tengamos en el terminal.

Datos biométricos

Los teléfonos más modernos incluyen un apartado específico que permite añadir datos biométricos para desbloquear el teléfono. Tenemos la opción de huellas digitales y también el reconocimiento facial.

En este caso, el terminal nos pedirá registrar nuestra huella digital utilizando el sensor incluido en el propio teléfono. Si empleamos un sistema de reconocimiento facial, necesitaremos la cámara del terminal para registrar nuestro rostro.

¿Qué es el bloqueo por IMEI?

El bloqueo por IMEI permite añadir una capa extra de seguridad en caso de que nos roben el teléfono.

IMEI quiere decir International Mobile Equipment Identity y este número funciona como un identificador único de nuestro dispositivo. Algo así como el DNI del terminal.

Lo normal es que este número aparezca en la factura de la compra del terminal. Aunque también lo podemos verificar en el apartado de ajustes del teléfono. Otra forma de mirarlo es llamando al teléfono *#06#.

Si perdemos o nos roban el dispositivo, podemos usar el IMEI para bloquearlo y dejarlo inhabilitado para hacer llamadas o conectarse a internet mediante datos usando la tarjeta SIM. Para ello tendremos que llamar a nuestro operador y pedirle que realice el trámite para concretar el bloqueo.

Limitar las notificaciones en la pantalla de bloqueo

Aunque las herramientas de bloqueo pueden ser muy útiles, hay que tener cuidado con la cantidad de información que puede aparecer en la pantalla de bloqueo. Es decir, aquella que aparece antes de introducir la contraseña, patrón de bloqueo o PIN.

En los teléfonos son sistema Android 5.0 y superior se incorporó un sistema que permite ver las notificaciones de redes sociales y otras aplicaciones en la página de bloqueo. Lo que permite tener acceso rápido a los mensajes, sin necesidad de entrar en las aplicaciones.

Sin embargo, este sistema que en principio se pensó como algo útil, también puede ser un agujero de seguridad por donde los espías o ladrones puedan conocer datos privados sobre nosotros.

Para evitar esto, lo mejor es limitar el número de notificaciones que aparezcan en la pantalla de bloqueo. Para ello tenemos que ir a la zona de ajustes del teléfono y buscar el apartado que dice Notificaciones. Allí deberíamos ver varias opciones y una de ellas hará referencia a las notificaciones que aparecen en la pantalla de bloqueo.

Por defecto, Android ofrece tres opciones: solo iconos, detalles y ocultar contenido. Con la primera únicamente aparecerán iconos de las aplicaciones, sin texto. Con la segunda aparecerá el icono, además del texto o eventuales mensajes que podamos recibir. La tercera opción elimina por completo los iconos y texto de la pantalla bloqueo.

Obviamente, si queremos ocultar absolutamente todo, lo mejor será seleccionar la opción de Ocultar contenido.

Activar la función para buscar el dispositivo

La opción de buscar el dispositivo está incorporada tanto en iPhone como en teléfonos con Android.

En los terminales de Apple la aplicación se llama Buscar y permite geolocalizar el dispositivo y hacer que suene, en caso de que lo tengamos en casa y no sepamos dónde. Con ella, además, podemos bloquear de forma remota el dispositivo e incluso borrar la información que tenemos en él.

En los teléfonos con sistema operativo Android podemos ir al apartado Encontrar mi dispositivo que se encuentra en los ajustes de la cuenta de Google asociada al teléfono. Desde allí podemos bloquear el dispositivo, borrar su contenido de manera remota e incluso hacerlo sonar para saber en donde está.

Google, además, incorpora una herramienta de mapas que nos permite geolocalizar el terminal. Para saber el lugar exacto en donde lo hemos olvidado o, en el peor de los casos, nos lo han robado.

Actitudes de seguridad

Si usamos un teléfono inteligente la seguridad no consiste únicamente en configurar cosas en el dispositivo. También es importante tener una actitud que nos permita prever peligros o agujeros de seguridad al manipular este dispositivo. Las principales recomendaciones al respecto son:

No usar señales Wi-Fi públicas

Puede ser tentador utilizar una red Wi-Fi pública para navegar en el móvil, pero hay que saber que no son nada seguras. Esto, porque no suelen tener contraseña, lo que implica que cualquier persona se puede conectar a ellas y extraer información si tiene el conocimiento adecuado para ello.

Eventualmente, las podemos emplear para revisar datos sin importancia, como alguna dirección en Google Maps, información del tiempo o las noticias. Pero jamás debemos entrar, a través de ellas, en aplicaciones de bancos, hacer transacciones o compras en línea. Esto, porque nuestra información bancaria o de tarjetas podría filtrarse o quedar expuesta a otras personas que están compartiendo la misma red.

No tener información sensible en el móvil

Parece algo obvio. Sin embargo, muchas personas no aplican esta recomendación. Suelen tener en su teléfono contraseñas importantes, informes médicos y un montón de información extremadamente sensible y protegida a nivel europeo.

La clave, en este caso, es quitar toda esa información y hacer un respaldo en un ordenador o disco duro externo que cuente con las medidas de seguridad adecuadas y que, además, esté en un entorno privado en donde hay menos posibilidades de sufrir un robo.

En este apartado hay que hacer mención especial a los navegadores que usamos en el móvil y que, en muchos casos, nos ofrecen guardar las contraseñas de las páginas web a las que hemos entrado.

Lo recomendable es no hacer caso a este ofrecimiento. Esto, porque si activamos la función de guardar contraseña, el navegador creará una base de datos con todas nuestras contraseñas reunidas en un único lugar. Lo que, eventualmente, podría generar una brecha de seguridad si alguien accede a nuestro teléfono.

Mira dónde dejas el teléfono

Es una de las actitudes de seguridad más básicas, pero que muchas veces se pasa por alto en bares o locales de ocio. Sitios en donde nuestro nivel de atención disminuye y en donde cualquier persona con malas intenciones puede aprovechar el despiste para hacerse con nuestro dispositivo.

Por lo mismo, no es recomendable dejar el teléfono encima de la mesa, la barra de un bar o el lavabo de un baño público. Lo importante es llevar el terminal siempre con uno, en algún bolsillo interno si es posible.

Si no tienes bolsillo, pero vas acompañado, puedes pedir a un amigo que se quede con tu móvil mientras tú vas al baño o te mueves hacia otro sitio. Si vas solo y no tienes bolsillo, puedes usar taquillas, si es que las hay, o pedir a una persona de confianza del local que te guarde un momento el teléfono.

Foto de Adrien en Unsplash